Conocemos a... Miguel Murias (podólogo)

Más de diez años de trabajo conjunto unen la trayectoria del podólogo Miguel Ángel Murias Carrasco (Burela, 1981) al Pescados Rubén Burela FS. “Hace 13 o 14 años, cuando empecé a colaborar con este club, la figura del podólogo era poco habitual, incluso en grandes clubes de fútbol. Para mí es un orgullo ser el podólogo del club durante todos estos años, forma parte de mi vida, sobre todo por los lazos de amistad que me unen a gran parte de su estructura. Empecé siendo un pequeño colaborador, entendiendo que el Burela FS es un club pequeño, y poniendo un granito de arena para que algún día pueda ser grande. Todas las personas y empresas que colaboramos de esta forma, sabemos que somos una parte importante para el club, sobre todo afectivamente”, explica Miguel Murias, cuyo trabajo junto al villagarciano Patricio Serqueira le ha llevado a compartir en Móscu el Congreso Internacional de Cirugía del Pie en Deportistas de Alta Competición (Universidad de Sechenov) con eminencias de la talla de Niek van Dyk, en el otoño pasado.

-Inauguró su clínica en Burela en 2003. ¿Cómo ha evolucionado la podología desde entonces?

- La podología es una especialidad relativamente moderna que ha evolucionado mucho en los últimos años, sobre todo en la área quirúrgica y biomecánica.

El boom del ciclismo, mountain bike, running, trails… también conduce a que nos impliquemos más en aspectos biomecánicos ya que el deportista amateur cada vez se cuida más. Los podólogos estamos concienciando a los deportistas de que cada persona tiene que tener un podólogo de cabecera porque no todos los pies son iguales y no todos pisamos igual, frente a un zapato estándar.

Después el resto del trabajo, el día a día, se centra en gente mayor, queratosis, uñas encarnadas…

-¿Entonces cree que cualquier paciente debería tener acceso a un podólogo en atención primaria?

- Es una carrera pública sanitaria, pero no estamos englobados dentro del Sistema Público Sanitario; es una incongruencia. Nosotros no podemos llegar a los pacientes y muchos de ellos no saben todas las soluciones que tienen para sus problemas, sobre todo de edad avanzada.

- ¿Qué problemas suele tener un jugador/ora de fútbol sala?

- Desde pequeñas cosas, como un ampolla en pretemporada, que parece algo insignificante pero que al final te pueden hacer perder dos o tres semanas de entrenamientos fundamentales, heridas o uñas encarnadas hasta problemas como esguinces, tendinitis, fascitis porque usan unas zapatillas demasiado flexibles, e incluso fracturas.

-¿Cómo se marca el trabajo de un podólogo a lo largo de la temporada?

- En pretemporada hacemos un estudio de cada jugador y a partir de ahí hacemos un plan preventivo, indicando sus puntos débiles, con su posterior seguimiento y control. El médico, Javier Couce, el preparador físico, Alfonso Mera, el fisioterapeuta, Arturo Martín, y yo nos reunimos en pretemporada para elaborar un plan individualizado y hacer un seguimiento en función de sus necesidades.

-¿El deportista es un buen paciente?

- No suelen ser buenos pacientes porque todos solemos ser un poco médicos y además el deportista a veces oye cantos de sirena de todos lados, buscando solucionar sus problemas de salud rápidamente. Pero hay algo muy importante, un deportista profesional tiene sus sensaciones y como en el resto de las áreas, para un podólogo es muy importante captar esas sensaciones, ejercer un poco de psicólogo, para tratar algunos dolores a partir de un buen diagnóstico.