¿Qué se necesita para ser un buen portero de fútbol sala?

En todo deporte, los jugadores se dividen en distintos estilos de juego, cada uno dominando una parte de la pista o incluso aportando sus habilidades únicas a un estilo de juego. Muchos son los jugadores que resultan ideales para organizar unas jugadas más defensivas o apostar por un estilo mucho más agresivo en el ataque. Sin embargo, tanto en el fútbol sala como en el fútbol en general, no solo debemos fijarnos en los jugadores que recorren el campo, sino en ese jugador que evita que el equipo rival marque un tanto: el portero.

El portero es uno de los jugadores imprescindibles en el campo y cuyo papel es realmente importante. De hecho, en Pescados Rubén Burela FS estamos sumamente orgullosos de los grandes porteros que forman nuestro equipo y los cuales os hemos presentado de manera mucho más personal, siendo algunos ejemplos de ello nuestras entrevistas personales a Edu o a Jozi. Sin embargo, ahora vamos a hablar de la importancia de su papel y esas habilidades que se necesitan para ser un buen portero.

¿Qué habilidades necesita un buen portero de fútbol sala?

A la hora de pensar en un buen portero de fútbol sala, debemos tener en cuenta que estos necesitan tener una buena formación detrás, la cual debe centrarse principalmente en acciones tanto defensivas como ofensivas. Debemos recordar que su papel no solo se centra en mantenerse bajo los palos y defender la portería, sino que debe actuar para evitar el gol o incluso poner nuevamente el balón en juego sin correr el riesgo de dar ventaja al equipo contrario.

Se trata, por todo esto, de un jugador que necesita tener una buena capacidad analítica, de observar su alrededor para comprobar cuál es la mejor jugada posible para su equipo y ser capaz de organizar la defensa. Además, para poder rendir al máximo nivel, debe tener una serie de habilidades que se adquieren durante los entrenamientos al igual que se perfeccionan con el tiempo de juego.

Entre las habilidades a pulir se presenta la agilidad, flexibilidad, una gran capacidad de reacción ante cualquier situación provocada tanto por el equipo rival como del equipo propio y, sobre todo, tener resistencia. Estos son algunos de los puntos a tener en cuenta a la hora de buscar cómo ser un buen arquero en fútbol sala.

Consejos para ser portero de fútbol sala

Los consejos más importantes y prácticos a la hora de pensar en ser un buen portero de fútbol se centran, sobre todo, en los entrenamientos, en iniciar este camino con un buen entrenador. Después de todo, el entrenamiento del portero no es exactamente igual al de sus compañeros puesto que su papel tampoco es el mismo. Por ello, tareas como el calentamiento, los estiramientos o los ejercicios serán diferentes y específicos para el portero.

A la hora de realizar los estiramientos es sumamente importante centrarse en el trabajo de piernas, abdomen, cuello y hombros; después de todo, son las zonas más afectadas para el portero. Por supuesto, estos continuarán a un calentamiento donde, a la hora de jugar con el balón, el juego tanto de manos como de pies comenzará. Para ello, es importante realizar movimientos donde correr y agacharse al mismo tiempo puedan estar presentes.

Entre los consejos más importantes a tener en cuenta se presenta la importancia de no saltarse ningún tipo de estiramiento ni calentamiento. Son muchas las ocasiones en las que hemos hablado de la importancia de realizar un buen estiramiento antes de entrenar y, en el caso de un portero, es incluso más importante. Esto se debe a que, realizando estos movimientos constantes se ayuda al cuerpo a asimilar posturas para evitar lesiones e incluso aprender técnicas para reaccionar más rápido. Además, ayuda al cuerpo a activarse para realizar ejercicios más intensos y favorecer la agilidad y reflejos, puntos sumamente importantes en un portero.